En su libro “La corrosión del carácter” Richard Sennett definía el carácter como el modo de ser peculiar y privativo de las personas por sus cualidades morales. Afirmaba que el carácter se centra en el aspecto a largo plazo de nuestra experiencia emocional. En ese sentido, planteaba algunos interrogantes al comienzo del libro que son los que marcarán la pauta del resto del contenido.
¿Cómo decidimos lo que es de valor duradero en nosotros en una sociedad que es impaciente y está centrada en lo inmediato?
¿Cómo conseguir metas a largo plazo en una economía entregada al corto plazo?
¿Cómo sostener la lealtad y el compromiso recíproco en instituciones que están en continua desintegración o reorganización?
Son unas preguntas muy interesantes y que hablan de como todo eso nos afecta en lo profesional y en lo personal como animales sociales que somos. Son preguntas que siguen plenamente vigentes pese al tiempo transcurrido desde la primera edición del libro en el año 2000.
Sennett finaliza su libro con una reflexión bastante pesimista “ … pero sí sé que un régimen que no proporciona a los seres humanos ninguna razón profunda para cuidarse entre si no puede preservar por mucho tiempo su legitimidad”.
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