Escuché de la película unas semanas antes de su estreno. De que trataba su guión, sus actores, su intención. Fui a verla con gran curiosidad de como plantearía el problema que conlleva encontrarse en una situación como esa, cuando lo has vivido en las propias carnes y por mi trabajo diario lo escucho muy a menudo.
Me refiero a la película @buelos.
No voy a destriparla, no te preocupes lector, pero si voy a realizar una reflexión desde las emociones que me hizo sentir, que no fueron pocas.
Y es que para aquellos que nos dedicamos a los recursos humanos, desde el comienzo de la película donde te encuentras con una situación de dinámica de grupo, se van dando situaciones cotidianas que en el día a día van apareciendo. Y te haces muchas preguntas:
- ¿Por qué a mí?
- ¿Me faltan conocimientos, habilidades, competencias?
- ¿Tendría que haber cambiado de trabajo antes?
- ¿A quién me dirijo para encontrar empleo?
- ¿Cómo manejo las emociones que me embargan?
- Y muchas más…
El no ser seleccionado a partir de los 50 años no es un problema actual, ya es muy “viejo”. Hace 30 años en los procesos de selección ese criterio era utilizado con frecuencia para descartar candidatos. Y el sexo, el servicio militar, el sector, etc.
El gran problema ya no es que no te llamen para una entrevista, dinámica de grupo, assessment center o como quieras llamar a la técnica, si no que te encuentras en una realidad emocional que no te deja pensar sobre qué alternativas tienes en cuanto a:
- Ya sea en la búsqueda de un nuevo trabajo conociendo las tendencias en la selección de personal y saber prepararse para enfrentarse a ellas.
- El tener otras opciones de trabajo que no se parecen a las que se tenían hasta ese momento.
Para ambas disyuntivas siempre se puede contar con un Career Coach, Mentor de carrera o consultor de outplacement que te ayude y acompañe en la búsqueda de un nuevo reto profesional.
Son muchas las personas que he conocido que al vivir ese momento de transición tras un despido han tenido que reflexionar, y mucho, para volver a sentirse fuertes para tomar decisiones en cuanto a si seguir buscando un puesto similar al que tenían, o por el contrario, reinventarse y optar por una nueva profesión.
Pero antes de llegar a que ocurra una situación como la que nos plantea la película, podemos y debemos, a lo largo de nuestra vida profesional, estar alerta a todas las señales que se reciben y que traducidas nos indican los posibles cambios que nos pueden afectar en nuestra carrera profesional, y así evitar tener que pasar por un escenario ocupado por falta de oportunidades. Parar y tomarnos un tiempo de reflexión cuando aparecen esas señales puede ser el flotador al que agarrarse.
El objetivo es no llegar a tener que afrontar una realidad como la que plantea la película, y creo que por lo que he ido escuchando a lo largo de tantos años y lo sentido por mí mismo, sospecho que lo que se puede hacer es tomarse un tiempo de introspección, creando un compromiso con nosotros mismos, y tratar esa emoción negativa que nos invade disfrutando de una buena película.
Te la recomiendo…y reflexiona….
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